martes, 27 de febrero de 2018

Ciencia Ficción: Javier Zanetti en Independiente


Cuántas veces en la vida, pero por sobre todo en este deporte, nos preguntamos qué hubiese pasado si...¿Cuántas veces soñamos con que nuestro destino pudo haber sido un tanto distinto a la realidad que palpamos? Que las vivencias que nos pegan de frente pudieron haber cabido en lo que el futuro le deparaba a otra persona. Que las frustraciones pudieron ser alegrías y viceversa. 

¿Qué pasa con el fútbol? Qué pasa cuando, envueltos en un mar de camisetas rojas que inundan la tribuna, nos agarramos la cabeza tras perder el cotejo y decimos: "Si entraba la de...". Cuando reunidos entre amigos, colegas, familia nos ponemos a recordar partidos al azar y siempre hay una jugada puntual que por algo nos llama la atención. Un poste que evitó un grito de gol, un cierre providencial que no privó de un abrazo con un extraño, un penal malogrado que no permitió un grito al unísono. ¿Qué hubiese pasado si...?

Todas estas preguntas, y seguramente más, pasarán por la cabeza de aquel hombre que dejó ir a uno de los mejores laterales derechos de la historia de la selección Argentina. Caracterizado por su conducta intachable, su buena marca, su habilidad de aparecer por sorpresa por atrás de todos, Javier Zanetti fue, en un momento, uno de los tantos purretes que empezaron a despuntar el vicio del fútbol en Villa Domínico. 

"Quedé libre de Independiente y fue un golpe muy duro porque siendo hincha, en ese entonces, fue muy difícil. Pero me abrió la puerta de Talleres (Escalada) que me dio la posibilidad de empezar de nuevo, de insistir y creer en el fútbol. Ahí debuté, conocí a mis amigos, a mi mujer…”, relató el multicampeón con el Inter de Italia sobre su niñez en el predio lindero al acceso sudeste. 

Pero hay más, sí, porque e "Pupi" jamás ocultó su sentir por esta camiseta. Sobre todo, en momentos en donde el horno no estaba para bollos: "Hoy sufro como hincha para que zafemos del descenso".

Poco más que alguna foto con una camiseta en las manos unirá a los protagonistas de esta historia. Quien mantiene su idolatría desde pequeño, manifestó que, en algún momento, las charlas con Julio Comparada -ex Presidente- existieron, pero nosotros, los hinchas, sólo podremos conformarnos con haberlo visto en la despedida de Gabriel Milito, en el "Libertadores de América".

1 comentario:

  1. Zanetti se ganó el apodo de El Tractor por su resistencia e incansable carrera enérgica por las alas para ayudar tanto al ataque como a la defensa. Era conocido entre sus compañeros de equipo por la regularidad y el régimen de entrenamiento físico, al que ha atribuido haber prolongado su carrera.

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